Resumen
Savoca es un pueblo que tiene una relación muy estrecha con la tierra: su nombre deriva del saúco ('savucu' en dialecto) que crece aquí de forma silvestre. Las ruinas del castillo de Pentefur dominan el pueblo que fue rodeado de murallas en la antigüedad y de las que hoy sólo queda la puerta de la ciudad. Merece la pena ver la Iglesia Matriz, donde, en el sótano, se acostumbraba a momificar a los cadáveres, y la Iglesia de San Nicolò, ubicada en un saliente rocoso. Una curiosidad: tanto este último como el Bar Vitelli, ubicado en el Palacio Trimarchi del siglo XVIII, fueron elegidos como plató para la película El Padrino. Pero para conocer Savoca, hay que pararse... ¡en la mesa! No hay que perderse los tallarines de pasta fresca hecha a mano servidos con hinojo salvaje y ragú de cerdo, o los macarrones "maccaruna" servidos con cortezas de cerdo o berenjenas.
98038 Savoca ME, Italia