Resumen
De fundación lombarda en el año 706 d. C., la iglesia y el monasterio pasaron de los benedictinos a los franciscanos, quienes estuvieron aquí desde 1216 hasta 1783. La ermita y su territorio fueron escenario de feroces enfrentamientos entre alemanes y partisanos durante la Segunda Guerra Mundial. Hoy, la ermita, varias veces restaurada, vuelve a acoger a los peregrinos y caminantes de la Via di Francesco, en busca de silencio, paz y recogimiento espiritual.