Otoño

La ciudad se encuentra a poca distancia de la capital, Pordenone, y conserva a su vez fascinantes edificios históricos. La torre del Reloj, también llamada «Porta di Sopra» porque está abierta a lo largo del camino que llega desde las montañas hacia el norte, tiene un diseño medieval y numerosas almenas. Si seguimos a partir de este punto, pasaremos junto a un espacio más abierto frente al Palazzo Gherardini y a la iglesia de Santa Maria Assunta. El pórtico adyacente pertenece a una logia originaria del siglo XVI, donde antiguamente se administraba justicia y hoy tiene su sede la Pro Loco. Un poco más adelante llegamos al castillo, que en su parte más antigua se remonta al siglo XI, pero hoy es conocido sobre todo por ser la sede local de una importante empresa vitivinícola con terrenos y establecimientos en el campo de Azzano Decimo, más al sur. Del Castillo a la parroquia de San Jorge solo distan unos pocos pasos. La iglesia es de estilo neogótico, aunque su fundación se remonta al siglo XV y alberga un retablo del siglo XVI de Francesco da Milano, una Virgen con San Jorge y otros santos, obra de Palma il Giovane, las portezuelas del son órgano de finales del siglo XVII y el coro es de madera tallada.

Bandera naranja del Touring Club Italiano A unos cuarenta kilómetros al norte de la capital, Calcata es un pequeño pueblo que ha conservado su patrimonio cultural y natural a pesar del paso del tiempo. Se encuentra sobre un acantilado de toba, inmerso en una exuberante vegetación, rica en fauna. Antes de la Segunda Guerra Mundial, a causa de los derrumbes del acantilado de toba, los habitantes abandonaron el lugar original y se fundó un nuevo pueblo a 2 km. Sin embargo, Calcata Vecchia no desapareció, al contrario, se empezó a poblar de artistas en busca de un lugar aislado y tranquilo donde vivir y poder crear. Las casas de toba roja fueron pobladas por escritores, intelectuales y artesanos que dieron nueva vida al pueblo y le insuflaron una especie de alma bohemia. Hoy en día, a lo largo de las callejuelas de Calcata es fácil escuchar a músicos, asistir a las actuaciones de artistas callejeros o admirar a los artesanos trabajando en sus talleres.

Importante centro comercial del este de Sicilia Riposto es una localidad portuaria a los pies del Etna e importante centro comercial a medio camino entre Catania y Taormina. De hecho, su nombre deriva del término"u ripostu", literalmente "el almacén", ya que la ciudad estaba equipada para albergar las mercancías que llegaban aquí por mar desde las ciudades vecinas. El centro urbano de Riposto gira en torno a la plaza San Pedro, dominada por el ayuntamiento modernista y el duomo neoclásico. Los observadores más atentos os daréis cuenta de que la iglesia, dedicada al patrón de la ciudad, está inspirada en la basílica romana de San Juan de Letrán. Deteneos también para admirar la iglesia de la Madonna della Lettera, la más antigua de Riposto, aunque su aspecto actual data de 1868. En su interior alberga numerosas obras de arte, pero lo más destacado de la iglesia es la cripta, donde además de numerosos objetos de las épocas árabe-normanda, bizantina y romana, se han desenterrado los cimientos, que datan del año 1100. Saliendo del casco antiguo, caminad por el paseo marítimo hasta torre Archirafi, un tranquilo pueblo de pescadores desde el que podréis contemplar el mar rompiendo contra las rocas volcánicas y resplandeciendo a la luz del atardecer.

Casa del Barroco Aragonés Situada en la parte oriental de Sicilia, cerca del volcán Etna, Paternò fue fundada alrededor del siglo II a. C. Bajo dominio aragonés, pasó a ser posesión de la familia Moncada y fue elevada a principado en el siglo XVI. Su centro, de tamaño medio, alberga los monumentos más importantes, como el Palazzo di Città, sede del ayuntamiento, el antiguo Palazzo Ciancio y el Palazzo Moncada. Emblemáticos son el castillo normando, construido en 1072, desde cuya terraza la vista se extiende hasta el valle del Simeto, y la Torre dei Falconieri, construida en la Edad Media como puesto de guerra y desde el siglo XVII utilizada como campanario de la iglesia de la Madonna dell'Itria. Hay muchos edificios religiosos barrocos, como la Iglesia de SS. Annunziata, la Iglesia de Santa Bárbara y el Santuario dedicado a Nuestra Señora de la Consolación. A las afueras de la ciudad se encuentra la Scalinata della Matrice, del siglo XVIII, que conecta las partes baja y alta de la ciudad y es la principal puerta de acceso a la iglesia de Santa Maria dell'Alto. En el lado este se encuentra el Jardín de Moncada, el mayor pulmón verde de la ciudad. En los alrededores de Paternò, te recomendamos una visita al Oasis de Ponte Barca, un espacio natural protegido caracterizado por islotes fluviales, marismas y cañaverales que atraen a numerosas aves acuáticas, y a las Salinelle di Paternò, un yacimiento geológico donde podrás presenciar interesantes fenómenos volcánicos.

En las laderas del Etna A medio camino entre Taormina y Catania, Giarre se encuentra en la costa oriental de Sicilia, entre el Etna y el mar Jónico. Su posición panorámica ofrece una hermosa vista del valle del Bove, por donde fluye la mayor parte de las coladas de lava de la vertiente oriental del volcán. Entre los monumentos, recomendamos la Catedral de Sant'Isidoro Agricola de estilo neoclásico, la Iglesia del Oratorio de San Filippo Neri, único ejemplo del barroco siciliano en la zona, la Iglesia de San Francesco al Carmine y el Santuario de Santa Maria la Strada. La intersección de Via Callipoli y Corso Italia es el corazón palpitante del centro histórico y está formada por calles de pavimento de lava, que discurren entre edificios del siglo XVIII y palacios Art Nouveau, como el Palazzo Bonaventura, con su ecléctica fachada. También señalamos la Fuente de Neptuno y el Monumento a los Caídos de la Gran Guerra. Los jardines de Villa Margherita y Villa San Francesco d'Assisi merecen una visita. La ciudad no da directamente al mar, pero a pocos kilómetros se llega a la playa de Stazzo. Subiendo por la costa, a media hora en coche, se encuentran las hermosas calas de Giardini Naxos. Para los más pequeños, recomendamos el Parque de Aventuras del Etna, el mayor del sur de Italia, con 17 recorridos y una zona de pícnic.

En la parte occidental de la meseta de Planargia, acariciada por la franja de mar entre el Golfo de Oristano y Capo Marrargiu y rodeada por las colinas de Montiferru, se encuentra Tresnuraghes. El terreno sobre el que se asienta ha estado habitado desde la antigüedad, como demuestran los nuraghi encontrados cerca del pueblo y como sugiere el propio nombre de Tresnuraghes, que indica los tres nuraghi situados cerca del centro. El pueblo, además, se caracteriza por sus casas bajas y, dando un paseo por sus pequeñas calles, se aconseja de pararse a visitar las pequeñas y graciosas iglesias, entre cuales la de Santa Croce, San Giorgio, San Lorenzo, Santa Lucia, Santa Maria de S’Adde, Santa Maria de Loreto, San Nicolo y Santa Vittoria. Fuera del centro, el mar y sus maravillosas playas, entre las cuales se destaca Porto Alabe con su fina arena rosa.

La región más pequeña de Italia, en la frontera con Francia y Suiza, está salpicada de los picos más altos de los Alpes, como el Cervino, el Monte Rosa, el Gran Paradiso y Su Majestad el Mont Blanc. Destino ideal para los amantes de los deportes de invierno, con los esquís en los pies aquí solo podéis disfrutar, con sus verdes valles y castillos de cuento de hadas, Valle de Aosta es un lugar encantador para vivir todo el año.

Si buscas una experiencia ecológica y una inmersión total en la naturaleza, estás en el lugar adecuado. El 25% del territorio de Campania son zonas protegidas, que se prestan al turismo medioambiental y sostenible. Te proponemos un recorrido por los 4 parques de Campania. Una ruta evocadora que te encantará, regalándote paisajes diferentes y llenos de encanto.

Con sus más de 70 000 hectáreas, el Parque Nacional de los Montes Sibilinos (entre Umbría y Las Marcas) es un auténtico tesoro de la biodiversidad en el que se alternan zonas húmedas y áreas arboladas de gran densidad, hasta llegar a maravillosas mesetas, como la de Castelluccio di Norcia, famosa por sus lentejas. Hay numerosos pueblos a diferentes alturas situados en un paisaje único que cambia con las estaciones: muchos de los picos de esta zona superan los 2000 metros de altitud, como el Monte Sibilla, el Monte Bove y la Cima del Redentore.

El territorio, que en diciembre de 1922 se definió como Parque Nacional del Gran Paradiso, se extiende alrededor del macizo del Gran Paradiso (cuya cima supera los 4000 metros) y en el pasado estuvo densamente poblado. La arquitectura de los pueblos se basa en la típica casa alpina: en la vertiente piamontesa con construcciones totalmente de madera, mientras que en la vertiente del Valle de Aosta se ha combinado la madera con la piedra. El apogeo de esta zona se alcanzó a mediados del siglo XIX, cuando los miembros de la Casa de Saboya venían hasta aquí para llegar a sus puestos de caza. La decisión de prohibir la caza al mismo tiempo que la creación del Parque fue fundamental para salvar al íbice alpino -que es su símbolo- de la extinción. Hoy en día, este paraíso montañoso, dividido en cinco valles en los que se alternan entornos rocosos, prados, bosques y sus bordes, está realmente al alcance de todos: gracias al proyecto "Un Paradiso Accessibile", la oferta turística de toda la zona protegida puede satisfacer las necesidades, los intereses y las expectativas de un mayor número de usuarios.

El Parque Nacional del Stelvio se creó en 1935 y sus 134.620 hectáreas en el corazón de los Alpes Centrales, que incluyen toda la cordillera Ortler-Cevedale, lo convierten en el mayor parque italiano. Abarca las cuatro provincias de Trento, Bolzano, Brescia y Sondrio y ofrece un paisaje único de glaciares, cascadas, lagos y cursos de agua glaciares, extensos bosques, zonas cultivadas, granjas de montaña habitadas todo el año, pueblos alpinos y aldeas singulares.

Bañada por dos mares, al oeste por el Tirreno y al este por el Jónico, muy diferentes en sus paisajes, playas y colores costeros, Basilicata encanta con sus pequeños y pintorescos pueblos que superan los 1000 metros de altitud, bosques y selvas que cubren las montañas, un paisaje caracterizado por una naturaleza virgen que va de la mano de una prestigiosa historia: todo en una pequeña región con atractivos para todos los gustos.

Todos los domingos del 27 de octubre al 1 de diciembre, la Piazza Cisterna se llena de vida con el Otoño Ragalnese: mercadillos con productos típicos, artesanía local y especialidades deliciosas. No te lo pierdas: Feria de Salchicha, Caliceddi y Vino Gran cierre con la Feria del Aceite de Oliva Nocellara del Etna Diversión para toda la familia: cada domingo, animación y talleres para niños de 10:30 a 13:30. ¡Ven a disfrutar de los colores y sabores del Etna!

En junio, los fines de semana de la ciudad se vuelven sabrosos y celebran la "Dolcissima", una cebolla roja con la marca De.Co (denominación de origen municipal), que se produce en Breme desde hace generaciones. Este acontecimiento gastronómico empezó como un pequeño evento local y, con el paso de los años, se ha convertido en un auténtico punto de referencia para gastronautas y chefs de Italia y otros países, en busca de nueva inspiración. Cada año, el festival pretende promover y exaltar un pequeño pero prestigioso producto de la corta cadena de suministro de la zona. Lo hace abrazando la tradición de la cocina del Val Lomellina, con sus generosas recetas. La "dolcissima" es la gran reina de los menús preparados para la ocasión y se combina con callos, guisos típicos, carnes a la brasa y la siempre presente tortilla de patatas, ¡imprescindible en la fiesta!

Algunos productos agrícolas destacan por su sabor, rendimiento y propiedades organolépticas, hasta el punto de convertirse en auténticas excelencias del territorio en el que se producen. En la hermosa región que rodea Trento, así como en el resto de Italia, algunos de estos productos merecen, igual que los monumentos y paisajes, un reconocimiento con menciones especiales, como el sello de Campagna Amica (Campo amigo), una fundación que promueve la excelencia y la biodiversidad en la cadena italiana de suministros agrícolas. Por la oportunidad de redescubrirlos y degustarlos merece la pena que hagamos un viaje a través de sus aromas y sabores, dentro de un marco natural sin igual.

"Dotta" (culta), porque en 1088 vio nacer la primer universidad del mundo occidental, la Universidad de Bolonia que atrae estudiantes de todo el mundo. “Rossa” por el color rojo característico de sus tejados, que se pueden admirar desde lo alto de sus torres. “Grassa” (gorda), porque es casi imposible resistir a la tentación de un bocadillo relleno de mortadela o un plato de lasaña humeante.

En el Alto Adigio, las imponentes cumbres de los Dolomitas son el fondo de suaves laderas cubiertas de viñedos, donde la vida rural se mezcla con la modernidad y los visitantes se sienten como en casa.

Donde el castaño encuentra un hábitat ideal, gracias a las condiciones climáticas templadas, la exposición al sol y la composición química y física del suelo, nacen las castañas más sabrosas: la Castañas de la IGP Monfenera. Estamos en las laderas de Monfenera, en las estribaciones de Grappa y Montello, en la provincia de Treviso, y aquí ocurren milagros.

Poco frecuentado por el turismo de masa, Molise, entre Abruzos y Apulia, es una región que acoge espléndidos tesoros artísticos, paisajes naturales que cortan la respiración y tradiciones milenarias Poco frecuentado por el turismo de masa, Molise, entre Abruzos y Apulia, es una región que acoge espléndidos tesoros artísticos, paisajes naturales que cortan la respiración y tradiciones milenarias. Elementos característicos de Molise, las cañadas (en italiano “tratturi”) son antiquísimos caminos de hierba a lo largo de los cuales nuestros antepasados, desde la época pre-romana hasta hace un par de siglos, se desplazaban dependiendo de la estación, junto con los rebaños. La trashumancia de animales, uno de los principales recursos de los campesinos del sur, seguía un recorrido riguroso: en otoño desde los frescos pastos de la montaña de los Abruzos hacia los más cálidos del Tavoliere delle Puglie; en verano el recorrido era el contrario.

estos son los magníficos paisajes de Langhe, Roero y Monferrato, de donde se producen los grandes vinos piamonteses italianos: el Barolo y el Barbaresco. Esta joya de Piamonte, con sus seductores paisajes, se ha convertido en parte de la lista del Patrimonio Mundial de la Unesco.

A medio camino entre las llanuras y los Prealpes se encuentra una tierra famosa por sus platos campesinos y sus renombrados vinos. Franciacorta, cuna de la excelencia y de las rutas gastronómicas. Proponemos un viaje para descubrir sus sabores, vistas impresionantes, pueblos pintorescos, arquitectura preciosa y complejos religiosos históricos. Un recorrido gastronómico y vinícola que también se puede hacer en bicicleta.

Ancona está hecha de mar y colinas. Parece que en griego antiguo «ankón» significaba «codo», y aquí el paisaje de la costa es realmente como un codo dibujado por la colina de la Catedral y los parques montañosos del Cardeto y del Passetto. En medio está la ciudad, frente al horizonte marino hacia Dalmacia, barcos y grúas a lo largo de los muelles, grandiosos edificios históricos, misteriosos relieves escultóricos, imponentes signos de la antigua civilización romana y playas en las laderas de los parques. Pasar un día de ocio en la gran ciudad-puerto del Adriático central significa, en definitiva, hacer descubrimientos. Elegir las dos ruedas es lo más aconsejable, pero no a pedales: estamos en una ciudad de desniveles, no todos tenemos en las piernas la fuerza de un campeón del ciclismo. Además, no te faltarán lugares para alquilar scooters. Se puede llegar a Ancona por la autopista, por la larguísima estatal 16 Adriatica o por ferrocarril. Si lo deseas, también hay un aeropuerto. Lo ideal sería llegar de la forma más natural: en barco, porque así se captaría el sabor del lugar de la forma más paisajística y naturalmente lenta. Seguir las maniobras, ver cómo se lanzan las amarras, ponerse en fila para desembarcar y, finalmente, empezar a bajar.

En la campiña toscana, en las afueras de Siena, entre aguas termales y excelencias gastronómicas y vitícolas, 5 rutas ciclistas en una naturaleza que parece pintada. En la Toscana, la espectacular campiña y los territorios en las afueras de Siena ofrecen paseos en bici lentos y en plena naturaleza que perfuman a vino y trufas, presumen de balnearios naturales y pueblos antiquísimos que siguen impregnados de la presencia de los antiguos etruscos. 5 itinerarios imprescindibles para disfrutar de una experiencia sensorial completa. Lugares encantadores que también han visto pasar el Giro de Italia 2023.

Allí te encontrarás inmerso en un paisaje hermoso durante todas las estaciones, que te llevará a una experiencia de alto contenido en sabor y salud. La oferta gastronómica no es solo el Km0: en el verdadero agroturismo, de hecho, más del 60% de los productos deben ser de cosecha propia o proceder de explotaciones y empresas agroalimentarias pertenecientes al mismo Sistema de Desarrollo Territorial. Aquí tienes 7 casas rurales verdes en Campania en las que podrás sumergirte en un mundo de manjares tan sencillo como sorprendente.