Resumen
Lo que hoy se ve se remonta al rey Fernando IV de Borbón, quien colonizó la isla en 1734 y construyó el foro borbónico del que formaba parte el puerto. Hoy es el corazón de la isla. Además, el paseo marítimo de San'Antonio junto a la playa es precioso.
El puerto se conecta con el resto de la isla a través de una sola carretera que permite visitar esta espléndida franja de tierra enclavada en el mar azul. Se llega en transbordador desde Formia, Anzio, Terracina, Isquia, Nápoles y Ventotene, o en barco propio atracando en uno de los muelles turísticos.
Habitada desde la prehistoria, en la época romana era muy apreciada por la familia imperial como lugar de veraneo y en ella todavía se pueden ver villas, necrópolis y piscinas. Un pequeño paraíso por descubrir entre la naturaleza y la historia.