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Cicloturistica Tevere-Farfa

Resumen

La Vuelta Ciclista Tevere-Farfa: un paseo no competitivo por la naturaleza

Junio pedaleando por el río rubio

La bicicleta es un medio de transporte extraordinario, capaz de combinar la satisfacción personal por el esfuerzo físico que se afronta con la sensación de libertad absoluta que da la velocidad, el viento acariciando nuestra cara y nuestros pies sin tocar la carretera. Poco importa que estemos firmemente apoyados en el sillín y los pedales, cuando estamos en la bicicleta, sentimos que volamos.

 

Un camino a lo largo del Tíber, o más bien... tres

A lo largo del Tíber se celebra cada año un evento que nace en parte de esta afición al ciclismo, en parte de la búsqueda de la belleza y las emociones ligadas al paisaje del gran río, y en parte del deseo de ponerse a prueba: hablamos de la Vuelta Ciclista Tevere-Farfa. Si por costumbre pensamos en estos eventos como competiciones, en este caso hay que cambiar el punto de vista: en este evento no competitivo organizado por el Cicloclub Ruote Grasse no hay jueces ni cronómetros, sino "sólo" recorridos inmersos en la belleza del lugar y las ganas de divertirse y ponerse a prueba.

La asociación, de hecho, estudia y propone tres itinerarios diferentes, para que cada uno, en función de su nivel de formación, pueda encontrar la opción más adecuada. Los ciclistas más experimentados podrán afrontar la ruta "Larga", que, como su nombre indica, es la más exigente: con sus 41 kilómetros y 900 metros de desnivel, pone a prueba a los ciclistas más entrenados. Pero les reserva un mimo especial: con sus carreteras de tierra que tocan colinas y pueblos a lo largo del Tíber, es de hecho la ruta más pintoresca de las tres. La ruta "Media" es para los ciclistas experimentados pero menos entrenados o, más sencillamente, para los que quieren participar pero también disfrutar de un paseo al aire libre: 27 kilómetros para un desnivel no superior a 600 metros. Por último, más cómodo y apto para todos los públicos es el "Corto", que en 24 kilómetros y 100 metros de desnivel atraviesa la maravillosa naturaleza alimentada por el "río rubio", y permite vivirla embriagado por sus aromas y la sensación de libertad absoluta que puede dar el pedaleo.

 

Lugares maravillosos

El entorno en el que se desarrolla el evento es, de hecho, desarmantemente bello: el Valle del Tíber desde el pueblo de Torrita Tiberina -donde se encuentra la Punta del Tíber y punto de partida del evento- hasta la Reserva Natural de Nazzano Tevere-Farfa, pasando por los municipios de Nazzano, Ponzano Romano y Filacciano, cada uno de los cuales ofrece increíbles vistas del río, de su fértil campiña y de las montañas circundantes, un maravilloso paisaje por el que pedalear.

Y no faltan las maravillas, ya que las distintas pistas se adentran en la Reserva Natural de Nazzano Tevere-Farfa, una zona húmeda extremadamente rica desde el punto de vista naturalista e irresistiblemente evocadora gracias al continuo juego de luces y reflejos que ofrecen sus extensiones de agua.

En este marco envidiable, enriquecer el evento con iniciativas deportivas colaterales que pretenden valorizar la zona resulta prácticamente natural: senderismo, paseos en barco por el río Tíber, piragüismo, kayak, dragon boat y otros deportes que se pueden practicar con total seguridad para jóvenes y mayores. Tendrá mucho donde elegir.

 

Credit to: Horcrux

Cicloturistica Tevere-Farfa

SR313, 15, 02047 Poggio Mirteto Scalo RI, Italia

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