Resumen
La historia de Perugina, el legendario fabricante de dulces y orgullo de toda una ciudad, se escenifica en los espacios expositivos de la Casa del Chocolate y Museo Histórico de Perugina, instalados en la fábrica del barrio industrial de S. Sisto, en la periferia sur de Perugia, donde también se puede admirar un edificio totalmente de acero, de vivos colores y forma circular que casi recuerda a un platillo volante: es la Mediateca Sandro Penna.
A lo largo del recorrido, uno descubre y profundiza en decenas de anécdotas y episodios de la vida de la empresa que vinculan la historia de Perugina a muchos momentos históricos de la Italia del siglo XX. Fue fundada en 1907 por un grupo de empresarios, entre ellos Francesco Buitoni (heredero de la conocida familia de fabricantes de pasta de Sansepolcro), mientras que, a partir de una idea de Luisa Spagnoli, fue en 1922 cuando hizo su aparición el "primer Beso", convertido más tarde en el símbolo de muchas fiestas (San Valentín, Día de la Madre o Día del Padre), con las famosas frases escritas en una pequeña hoja de papel que todo el mundo ha guardado al menos una vez. En definitiva, un chocolate que ha hecho historia y que sigue en la cresta de la ola, gracias a sus bondades y a exitosas campañas publicitarias y eficaces operaciones de marketing, como la reciente "edición limitada" de Dolce&Gabbana.
Con los ojos aún llenos de las imágenes proporcionadas por películas, fotografías de archivo e historias de creatividad empresarial, será entonces el momento de observar desde arriba la maquinaria y los trabajadores de la fábrica Perugina en plena faena, antes de concluir la visita con una dulce degustación de chocolate y otros dulces.
El museo requiere reserva obligatoria, por lo que es aconsejable planificar la visita con antelación, sobre todo si por casualidad también desea participar en un curso y pasar unas horas aprendiendo a procesar el cacao, templar el chocolate y mezclar diversos ingredientes bajo la dirección de un maestro chocolatero.
