Resumen
Desde siempre un importante cruce de caminos entre Florencia, Imola y Bolonia, San Piero a Sieve se desarrolló durante la Edad Media en el puente sobre la Sieve, reconstruido por los florentinos en 1372, y alrededor de la parroquia de San Pietro, que data del siglo XI y que conserva en su interior una pila bautismal atribuida a Giovanni della Robbia.