Resumen
Aquí se encuentra la mayor masa de agua de Castelli Romani, casi una dependencia de la capital entre orillas que sobresalen en varios lugares. Los restos de la antigüedad no faltan: bajando de Castel Gandolfo a lo largo de Via Gramsci se encuentra el llamado Ninfeo dórico, que se remonta a la época republicana, mientras que en las orillas se encuentra el Ninfeo Bergantino, también conocido como Bagni di Diana, ambos excavados en el suelo y en origen pertenecientes a una villa de Domiciano.
El lago tiene un efluente artificial, una grandiosa obra de ingeniería romana que, según la tradición, se construyó en un solo año, entre el 398 y el 397 a.C., para hacer caso a una predicción según la cual Roma ganaría la batalla contra la ciudad etrusca de Veio con la condición de que las aguas del lago se unieran a las del mar. El canal es subterráneo, parte de una cámara de maniobra hecha con bloques de peperino, tiene casi un par de kilómetros de longitud y pasa muy por debajo del borde del cráter.
Puedes recorrer a pie toda la circunvalación del tramo de agua en una longitud total de unos diez kilómetros, en parte por una carretera asfaltada y en parte por una pista forestal que el Club Alpino Italiano marca con el número 510.
Lago Albano, 00040 Castel Gandolfo RM, Italia
