Boville Ernica

Encerrado como un tesoro que debe ser custodiado por una imponente muralla que antes protegía la ciudad del peligro de las incursiones enemigas, Boville Ernica es un pueblo encantador que aún recuerda el pasado medieval en su arquitectura y ambiente. Entre los estrechos y sinuosos callejones, las pequeñas plazas y los arcos, non  sumergimos en un contexto de gran belleza. Sin duda alguna hay que ver el Palacio Filonardi, del siglo XV, el mayor complejo arquitectónico del pueblo, que incluye también la Abadía de San Pietro Ispano. Es aquí, en la Abadía, destino de espiritualidad y peregrinación, donde se conserva un mosaico de Giotto perfectamente conservado. En cambio, al salir del centro histórico, uno se pierde en la belleza del paisaje, entre las colinas verdes y el cielo azul.