Cicloturismo en Italia: viajar en tren+bici nunca ha sido tan fácil

Italia hace tiempo que entendió que el turismo lento y sostenible representa el futuro y se está esforzando por promover este sector haciendo hincapié en los pequeños pueblos, lanzando iniciativas a favor de los paseos por la naturaleza y del turismo enogastronómico.
Algunos de los aspectos en los que el Ministerio de Turismo italiano ha decidido invertir es el cicloturismo, con el objetivo de transformar Italia en uno de los destinos más codiciados entre los amantes de las dos ruedas.

No faltan las rutas ciclistas de norte a sur del país, y los viajes en tren con la bicicleta en Italia son cada vez más fáciles. Si estás pensando en descubrir el bello pueblo sobre tu fiel bicicleta de paseo o de montaña, aquí tienes información práctica para viajar sin preocupaciones.

Dejemos claro un punto necesario: a bordo de todos los trenes que atraviesan el territorio italiano, está permitido llevar tu propia bicicleta sin coste adicional, siempre que sea una bicicleta plegable o una bicicleta tradicional desmontada. Solo tienes que quitar una de las dos ruedas y guardarla en los espacios previstos para el equipaje.
En caso de emergencia, es bueno saber que sigue siendo una opción viable en cualquier lugar y sin reservas adicionales.

Subir a un tren sin necesidad de desmontar y volver a montar la bicicleta es una de las grandes ventajas que ofrecen los trenes Intercity, que permiten llegar sin cambios a ciudades pequeñas, medianas y grandes con más de 100 conexiones diarias. 

A bordo de los trenes Intercity puedes llevar tu bicicleta montada con reserva obligatoria por 3,50 euros. Tu punto de referencia es el vagón 3, que cuenta con 6 plazas de aparcamiento para bicicletas y 2 puntos de carga para bicicletas eléctricas. El servicio de transporte en bicicleta opera en más de 86 conexiones en toda Italia:

• a/desde Milán, Ventimiglia, Génova, La Spezia, Livorno, Grosseto, Bolonia, Roma, Nápoles, Pescara, Bari, Taranto, Lecce y Reggio di Calabria;
• a/desde Roma, Trieste, Ventimiglia, Florencia, Salerno, Reggio di Calabria, Perugia, Ancona, Bari, Taranto, Palermo y Siracusa;
• a/desde Turín, Génova, Roma y Salerno.

Al hacer la reserva, te aconsejamos comprobar si esta opción está disponible en el tren elegido.

El número de trenes regionales que permiten el transporte de bicicletas también aumenta continuamente en todas las regiones de Italia, especialmente gracias a los nuevos vagones para bicicletas de Trenitalia con 64 plazas cada uno.

Las modalidades de acceso son las mismas que para los trenes Intercity; elige un tren equipado para transportar bicicletas, marcado con un pictograma especial tanto en línea como en los horarios de cada estación. Antes de subir al tren, compra un suplemento para bicicletas por 3,50 euros, que puede utilizarse de manera indefinida hasta las 23:59 horas del día indicado en el billete, u otro billete de ida de segunda clase y, tras subir al tren, coloca la bicicleta en los espacios previstos. Se permite el transporte de una bicicleta tradicional por viajero, incluso con pedaleo asistido, de una longitud no superior a 2 metros.

Sin embargo, en algunas regiones el coste del transporte en bicicleta se reduce a cero como incentivo para el cicloturismo. En 2022, esto se aplica a los trenes regionales en los Abruzos que ofrecen 1500 asientos para bicicletas cada día y los que atraviesan Las Marcas.

El transporte de bicicletas también es gratuito en Basilicata, Liguria, Puglia y Sicilia, mientras que en Campania tiene un coste reducido de 2 euros por pasajero y es gratis los sábados y festivos.

Trenord, activo en todo el territorio de Lombardía, permite el transporte de bicicletas en más de 900 trenes con un recargo de 3 euros dentro de los límites tarifarios de la región y de 3,50 euros para las rutas suprarregionales.
En cambio, si necesitas viajar en bicicleta por las rutas urbanas de Milán, puedes hacerlo sin coste alguno, sin necesidad de comprar un billete.