Pieve di Sant'Agata (Sant'Agata)

Su origen es muy antiguo, aunque el primer documento conocido es del año 984 y su aparición se remonta a la segunda mitad del siglo XII. El exterior es sencillo y cuadrado, mientras que el interior se estructura en torno a seis altos pilares sobre los que descansa directamente el tejado a dos aguas. Alberga un recinto bautismal compuesto por siete paneles con incrustaciones unidos por marcos tallados de diversas formas, realizado en 1608 a partir de elementos del antiguo púlpito medieval dañado en el terremoto de 1542, el altar relicario de Santa Águeda y una pintura sobre tabla de 1383 de Jacopo di Cione que representa a la «Virgen con el Niño».