Resumen
El castillo Malaspina (también llamado de Serravalle) mira a Bosa desde lo alto de la colina de Serravalle. Se trata de un complejo escenográfico construido en varias fases a partir de la segunda década del siglo XII, cuando los Malaspina mandaron levantar algunas de las torres del torreón: la gran torre se construyó en traquita rosa claro, en la base el almohadillado es de sillares de traquita roja. El castillo se amplió posteriormente hasta alcanzar un perímetro de 300 metros, intercalado con siete torres poligonales y cuadradas. A partir de 1468 se construyeron terrazas para la colocación de armas de fuego; desde ellas se abre un panorama extraordinario sobre los tejados del casco antiguo, las cúpulas de las iglesias y el curso del Temo hasta el mar. En el interior del castillo, en la plaza de armas, en el siglo XIV se erigió la iglesia de Notra Signora de sos Regnos Altos. Posteriormente fue remodelada y conserva un espléndido ciclo de frescos italiano-provenzal y franciscano, que data de entre 1350 y 1370. El ciclo se articula en las tres paredes principales del cuerpo de fábrica primitivo y representa la vanidad de los bienes materiales y el rescate de la muerte que ofrece la Eucaristía.