Campania, mar de postal y sabores vertiginosos

Las primeras presencias del hombre en Campania remontan al Paleolítico Medio, la época del hombre de Neandertal, - primer milenio antes de Cristo - la habitaron varias poblaciones indoeuropeas, como los oscos, los aurunos, los ausoni, los sidicinos y los samnitas; después llegaron los etruscos, ocupando la campiña de Campania, y los griegos, que hicieron de la franja costera una colonia.

El principal centro etrusco era Capua, mientras que los primeros asentamientos griegos dieron lugar a Pithecusa (Ischia), Kyme (Cuma), Parthenope primero y después Neapolis (Nápoles), Dikaiarcheia (Pozzuoli) y Poseidonia (Paestum).

Así, Campania se convirtió en uno de los centros culturales más importantes de la Magna Grecia.

En la historia de la región, las erupciones del volcán Vesubio fueron frecuentes: la más violenta fue la de Pompeya y Ercolano en el año 79 d. C., provocando la destrucción de las ciudades de Ercolano, Pompeya, Estabia y Oplontis, cuyas ruinas, enterradas bajo capas de piedra pómez, constituyen hoy una zona arqueológica de gran valor.

Tuvo especial importancia el ascenso de la dinastía normanda, durante el cual Campania vivió un periodo de unidad política bajo el Reino de Sicilia. Con la sucesión de las dinastías de los angevinos, los aragoneses y, sobre todo, los Bourbons, el reino de Nápoles se convirtió en uno de los principales centros económicos, culturales y artísticos de Europa. 

No es fácil elegir por dónde empezar a descubrir las maravillas de esta región, aunque empezar por Nápoles es casi una obligación. Elevada a la sombra del Vesubio, que merece una excursión, y bañada por las aguas del golfo homónimo, es una de las ciudades más visitadas y queridas del mundo.

Es imposible estar aquí y no ver sus yacimientos arqueológicos -Pompeya, Ercolano y los Campi Flegrei- o no visitar el Museo Arqueológico Nacional de Nápoles, que alberga algunos de los objetos más preciados de su pasado.

Tercera ciudad más poblada de Italia y caracterizada por una gran variedad de paisajes, Nápoles tiene un centro histórico declarado Patrimonio de la Humanidad UNESCO por la gran cantidad de edificios de valor incalculable, como el Palacio Real de Nápoles, que durante siglos fue el centro del poder de todo el sur de Italia, y el Castel dell'Ovo de Nápoles, la fortaleza más antigua de la ciudad.

No te pierdas Salerno, puerta de entrada a la impresionante Costa de Amalfi. Conocida en todo el mundo por haber dado origen a la Escuela de Medicina de Salerno, la primera institución médica de Europa, cuenta con un rico centro histórico y un largo paseo marítimo. En su golfo encontramos Paestum, que, con sus templos, es Patrimonio de la Humanidad UNESCO como el sitio arqueológico mejor conservado.

Caserta es un destino turístico atraído por su notable patrimonio artístico, histórico y cultural: aloja magníficas iglesias, palacios y abadías, pero sobre todo el Palacio de Caserta.

Patrimonio de la Humanidad UNESCO, fue construido a instancias de Carlos Borbón, quien lo encargó al arquitecto Luigi Vanvitelli, y es uno de los mayores complejos arquitectónicos de Europa.

En fin, Pozzuoli, fascinante ciudad de la zona de Campi Flegrei rica en historia y arte.

Empieza en Cilento, provincia de Salerno, te cautivará con su costa y su paisaje interior. Gran parte de su territorio se encuentra dentro del Parque Nacional del Cilento, Vallo di Diano y Alburni, que protege el rico patrimonio natural de la zona.

No te pierdas la isla de Ischia, que se hizo famosa en los años 50 gracias al empresario Angelo Rizzoli y es internacionalmente conocida por sus hermosas playas y aguas termales.

Hablando de lugares exclusivos, visita Capri, el destino más buscado por los VIPs a los que les gusta la fiesta en los bares de la famosa piazzetta.

Entre tiendas de grandes marcas y restaurantes caros, posadas y artesanos, Capri ofrece vistas impresionantes de los Faraglioni, la bahía de Nápoles y el golfo de Salerno.

Una visita obligada es toda la Costa de Amalfi, que se extiende entre el Golfo de Nápoles y el Golfo de Salerno y comprende 16 municipios de la provincia de Salerno, entre ellos la hermosa Amalfi.

Un balcón natural con vista al mar azul y a las laderas de los montes Lattari, entre playas y terrazas cultivadas con cítricos, vides y olivos.

Los amantes de la historia no serán defraudados por Campania y podrán seguir la pista de la antigua civilización romana, visitando la amplia zona arqueológica de los Campi Flegrei en el Golfo de Pozzuoli, o los yacimientos arqueológicos de Pompeya y Ercolano en Nápoles.

Si te gusta salir de la ruta turística, busca la Casa Vanvitelliana, un edificio de la época de los Bourbons en una zona de caza y pesca dentro del parque del lago Fusaro en Bacoli.

Igualmente fascinante es el Giardino della Minerva, un jardín botánico en el centro histórico de Salerno que, durante la Edad Media, fue un laboratorio de enseñanza al aire libre para los estudiantes de la escuela de medicina de Salerno. 

Sabrosa y genuina como la gente de Campania, la cocina de esta región sabe seducir con gusto: ¿te suena la pizza?

Prueba el tomate San Marzano alargado, perfecto para tomates pelados y salsa de tomate, o el tomate Piennolo del Vesuvio D. O. P., una variedad cultivada exclusivamente en las laderas volcánicas del Vesubio.

Los amantes del queso apreciarán el provolone del monaco, un queso de pasta filata con sabor a mantequilla, tan delicioso como la famosa mozzarella de búfala de Campania que todo el mundo envidia.

Muchas delicias para el paladar, para acompañar con los apreciados vinos de la zona: empezando por el Greco di Tufo, el apreciado vino espumoso seco D. O. C. G. producido en ocho municipios de la provincia de Avellino.

Entre los eventos que se celebran en Campania, destaca la Fiesta de la Candelaria, que conmemora la presentación del Señor en el Templo y el rito de purificación de la Virgen María 40 días después del nacimiento de Jesús.