Resumen
La basílica de San Marcos, que domina una plaza repleta de gente y constituye un punto de referencia para la zona en la que se encuentra, es una de las iglesias más importantes del centro histórico de Florencia. Parte del gran complejo del convento de San Marcos acogió a numerosas personalidades de la espiritualidad y la cultura del siglo XV, entre ellas Cosme el Viejo, el Beato Angelico, Ambrogio Catarino Politi y Fra Bartolomeo. Además, allí vivió Tommaso Caccini, conocido por haber investigado a Galileo Galilei, y sobre todo fray Girolamo Savonarola, que predicaba contra la decadencia de las costumbres, luego ahorcado y quemado en la Piazza della Signoria en 1498. Desde 1934, también vivió allí Giorgio La Pira, alcalde de Florencia, cuyo proceso de beatificación está en curso y cuyo cuerpo todavía se encuentra en el complejo monástico. Desde 1869, el antiguo convento alberga el Museo Nacional de San Marcos, a pesar de que ni la iglesia ni el claustro contiguo de San Domingo forman parte de él.
