Resumen
Antiguamente, en la zona donde ahora se alza la iglesia de Santa Maria della Rocca , había un castillo de la época longobarda con una pequeña iglesia adosada.
En 1039, el castillo y la pequeña iglesia fueron donados a la abadía de Farfa y pasaron a manos de los monjes benedictinos.
Como atestigua un epígrafe, en 1330 se realizaron obras para demoler el castillo y construir una iglesia más grande.
La iglesia antigua se incorporó a la nueva, creándose así pasillos laterales que actualmente son visibles en la cripta, uno de los cuales se utilizó como zona de entierros a partir del siglo XVI.
En el interior de la cripta, que ocupa toda la superficie del piso superior, hay numerosas columnas de ladrillo con capiteles achaflanados en las esquinas que sostienen arcos apuntados y de medio punto.
Aún se conserva parte de los frescos, atribuidos al Maestro de Offida, que representan los ciclos de Santa Catalina de Alejandría, Santa Lucía y otros santos y vírgenes en el Trono.
La iglesia superior, de una sola nave, conserva restos de los frescos que antaño cubrían por completo las paredes. Bien conservadas son las de la pila del ábside, que representan profetas, ángeles músicos y santas vírgenes, obra del maestro milanés Ugolino di Vanne. En el lado opuesto, una Deposición, una Crucifixión y una Virgen con el Niño y Santa, único fresco de época renacentista, atribuido a Vincenzo Pagani.
Photo credit: Regione Marche
Via Roma, 98, 63073 Offida AP, Italia
