01
0 1
Resumen
Estamos en el barrio de Umbertino, en un pequeño y sobrio local donde trabaja la gran chef Silvia Cardelli. Una recepción no muy amplia nos introduce en una pequeña sala cuidada y acogedora donde encontramos a su marido Andrea Ferrero, atento y puntual, que aconseja y sirve una serie de platos, casi todos de la zona, reconocibles y muy bien propuestos. Nada de degustaciones, aquí las porciones se dejan ver bien. Para empezar, langostinos con crema agria o el capón magro, que es de los mejores de toda la vida. Se sigue con la pasta mixta con patatas y marisco de gran sabor. Recomendado: un magnífico bacalao realzado por una crema de cebolla, aceitunas y chocolate blanco realmente equilibrada.
Cree una cuenta o inicie sesión para guardar su lista de deseos.
¿Ya tiene una cuenta