Resumen
Entre los lugares más evocadores de Salerno, la Catedral merece un lugar de honor. La Catedral de Santa María de los Ángeles, San Mateo y San Gregorio VII, encargada por Roberto il Guiscardo y construida entre 1080 y 1085, es un increíble ejemplo de diferentes estilos arquitectónicos, que en lugar de estar reñidos entre sí confieren a toda la estructura un encanto sin igual.
El exterior de la catedral es típico de la arquitectura románica, mientras que el interior está repleto de arcos, columnas, mosaicos y esculturas que abarcan desde la Edad Media hasta el Barroco. Lo que atrae a los visitantes es, ante todo, la puerta bizantina de bronce de entrada a la basílica, situada en un portal medieval de mármol.
También hay muchos elementos de valor simbólico, como el león y la leona que custodian la entrada y representan el Poder y la Caridad de la Iglesia, o el Campanario con sus símbolos bíblicos.
Pero la verdadera obra maestra es la cripta de San Mateo, de gran valor artístico, que alberga los restos del patrón de la ciudad.
Piazza Alfano I, 84125 Salerno SA, Italia