Sèn Jan di Fassa

Vigo di Fassa es un encantador pueblo ladino ubicado en una amplia y soleada terraza, rico en historia y atractivos culturales. Durante siglos fue la capital religiosa y administrativa del Valle de Fassa, a medio camino entre Moena y Canazei, y uno de los primeros centros turísticos del valle. Desde Vigo es fácil llegar a todos los famosos picos de las Dolomitas de Fassa, desde el Monzoni hasta los grupos de Catinaccio, Latemar, Sella y Marmolada. La iglesia parroquial de San Giovanni y el santuario gótico de Santa Giuliana son los símbolos del pueblo. La iglesia parroquial se consideraba la iglesia madre del valle, con su audaz campanario de 67 metros de altura revestido de tejas de alerce de color rojizo. No muy lejos se encuentra el Museo Mineralógico Monzoni, que alberga la colección privada más completa de minerales de dolomita surgidos del mar hace 250 mil años. El santuario de Santa Giuliana, cuya existencia está documentada desde 1237, es uno de los más antiguos del valle y se levanta sobre un lugar de culto prehistórico, el castelliere de Ciaslìr. Debajo de la iglesia, es posible visitar el Cementerio de Guerra, que contiene los restos de 663 soldados caídos en la Primera Guerra Mundial, procedentes de varios países que formaban parte del Imperio Austrohúngaro en aquella época. En el pueblo también se encuentra el Museo Ladino de Fassa, el "cofre de la memoria" que alberga las colecciones etnográficas del Istitut Cultural Ladino.