Resumen
Dividida en Alta y Baja, Modica tiene dos almas distintas. El paisaje arquitectónico cambió tras el terremoto de 1693, cuando se reconstruyeron iglesias y palacios en estilo barroco. Muchos se alzan en Modica Bassa a lo largo de Corso Umberto, como la iglesia de San Pietro con su escalinata decorada con estatuas de los 12 apóstoles y numerosos palacios nobiliarios cuyas fachadas pueden admirarse.
Modica Alta es el corazón histórico de la ciudad, un laberinto de callejuelas retorcidas y escaleras que conducen a la espectacular Catedral de San Giorgio y, subiendo aún más, al Castillo de los Condes, del siglo XIII, con su Torre del Reloj y el Mirador del Pizzo, desde donde se puede admirar la ciudad desde lo alto. La mejor hora para llegar es por la tarde, cuando la ciudad se ilumina. La iglesia de San Juan Evangelista también se encuentra en la zona.
De regreso a Modica Bassa, visita el lugar de nacimiento del poeta ganador del Premio Nobel Salvatore Quasimodo y la iglesia rupestre de San Nicolò Inferiore, con frescos que datan del siglo XII.
Por último, puedes recuperar energías con el chocolate de Módica, preparado según el antiguo método azteca de elaboración en frío, importado a Sicilia por los españoles. Descubre todo el proceso en el Museo del Chocolate y pasa por una de las históricas tiendas de dulces para degustarlo.
97015 Módica, Ragusa, Italia
