Resumen
Esta villa de la localidad de Riscossa se visita sobre todo por el encanto rococó de su interior y por el mobiliario, subrayado por los espectaculares frescos que se cree que son obra de dos artistas muy codiciados en los ambientes venecianos de finales del siglo XVIII: Giuseppe Angeli, alumno de Giambattista Piazzetta, y Gerolamo Mengozzi Colonna, colaborador predilecto de Tiepolo. El salón principal ilustra la gloria de la familia Widmann en representaciones decoradas con marcos y estucos. La arquitectura es igualmente notable, tal vez realizada según un proyecto de Andrea Tirali, en un complejo que, además del edificio principal con su propio jardín, incluye el patio adyacente, una «barchessa», una pequeña iglesia y el vasto parque situado al norte. Prácticamente enfrente de la villa, se pueden ver en la orilla opuesta del Naviglio del Brenta las «barchesse» supervivientes de Villa Valmarana, del siglo XVI, cuyo cuerpo central fue demolido a principios del siglo XX para eludir el impuesto sobre las viviendas de lujo. Sin embargo, aquí tampoco faltan los frescos del siglo XVIII.
