Resumen
La iglesia de San Buenaventura al Palatino, construida en 1675 por iniciativa del cardenal Francesco Barberini, se alza en la colina del Palatino, en el barrio Campitelli de Roma. Construida sobre los restos de una cisterna perteneciente al acueducto Claudio, la iglesia está dedicada a San Buenaventura de Bagnoregio, figura ilustre de la orden franciscana del siglo XIII.
Junto al edificio se levanta un convento, que se convirtió en un importante centro de espiritualidad y misión franciscana, acogiendo a notables personalidades como el Beato Buenaventura de Barcelona y San Leonardo de Porto Maurizio. Este último, famoso por promover la práctica del Vía Crucis, difundió también esta devoción a través de los edículos de las Estaciones, dispuestos a lo largo del camino que conduce a la iglesia.
La fachada, sobria y esencial, está enriquecida por una estatua de San Buenaventura del siglo XVIII. El interior, de una sola nave, alberga valiosas obras de arte, como la Inmaculada Concepción de Filippo Micheli en el altar mayor y dos pinturas de Giovanni Battista Benaschi: la Crucifixión y la Anunciación.
Un aspecto importante es la presencia de los restos de San Leonardo de Porto Maurizio, conservados en el interior de la iglesia. Su celda monástica se ha transformado en un pequeño museo que ofrece a los visitantes una conmovedora visión de la vida del santo. Aún hoy sigue siendo un punto de referencia espiritual, acogiendo celebraciones litúrgicas y actividades pastorales, sobre todo para los jóvenes, continuando así la tradición franciscana de hospitalidad y misión.
Inmersa en el verdor del Palatino, la iglesia destaca como lugar de silencio y contemplación, lejos del bullicio urbano.
Completa tu visita la iglesia de San Buenaventura al Palatino participando en la experiencia de Foro Romano y Colina Palatina: Visita guiada.
Via di S. Bonaventura, 7, 00186 Roma RM, Italia