Resumen
Compiano, burgo típico de los Apeninos, deja vislumbrar su historia medieval en las antiguas murallas que, aún hoy, recogen el centro histórico y en las que se abren dos entradas de la fortaleza. Pero el pueblo es, ante todo, un lugar para descubrir las especialidades de la cocina local, de hecho, constituye una parada del notable itinerario: "Strada del Fungo Porcino" (Camino del Hongo Porcino) y de las bellezas del paisaje que rodea el burgo, un escenario en el que la mirada se pierde entre el frondoso de los colinas y el azul del cielo. Es un alma apenina, sencilla y auténtica.