Castel del Monte, la fortaleza de los misterios de Andria
4 minutos
Castel del Monte, una obra maestra de arquitectura medieval, Patrimonio de la Humanidad UNESCO, rica en símbolos y misterios.
¿Está listo para descubrirlos?
Qué es y dónde se encuentra Castel del Monte
Castel del Monte es uno de los símbolos de Puglia, una fortaleza medieval del siglo XIII en la Meseta de Murge, afuera de Andria, costa adriática del sur de Italia.
Construida por Federico II a 540 metros sobre el nivel del mar, la fortaleza de Castel del Monte de Andria se considera un brillante ejemplo de arquitectura medieval. Refleja la cultura humanista y la vasta educación de su fundador, Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico y rey de Sicilia entre 1220 y 1250.
Historia e información sobre Castel del Monte
Federico II de Suabia fue una figura fascinante de la historia medieval, rodeado de un aura de misterio y protagonista de numerosas leyendas. Federico II era un apasionado de las matemáticas, la poesía, la filosofía y la astronomía, dotado de un espíritu cosmopolita que lo llevó, como Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico primero y Rey de Sicilia después, a acoger en su corte a eruditos griegos, árabes, italianos y judíos.
Durante su reinado, Federico II de Suabia hizo construir numerosos castillos por todo el sur de Italia, pero en Castel del Monte encontramos aspectos clave de la figura del gobernante y sus pasiones.
Castel del Monte fue construido a partir de 1240 bajo un rigor geométrico y matemático, combinando diferentes elementos estilísticos, desde el corte románico de los leones de la entrada hasta el marco gótico de las torres, sin olvidar el arte clásico de los frisos interiores y los refinamientos islámicos de los mosaicos. La ubicación tampoco fue casual, se diseñó para crear efectos especiales de luces y sombras en determinadas épocas del año.
Por qué Castel del Monte es un sitio UNESCO
La fortaleza de Castel del Monte, ligada a Federico II de Suabia, es un ejemplo de arquitectura medieval que, reflejando las ideas humanistas del emperador, consigue mezclar armoniosamente elementos de la arquitectura clásica con decoraciones de la arquitectura árabe.
Esta perfección llevó a la UNESCO a considerarlo Patrimonio de la Humanidad en 1996 y a reconocer a Federico II precursor de los humanistas modernos.
Qué ver en Castel del Monte
La perfección formal de Castel del Monte se ve ya cuando desde Andria se entra al Parque Nacional de Alta Murgia y empiezas a acercarte a la colina sobre la que se levanta. Notarás rápidamente la ausencia de uno de los elementos típicos de la arquitectura medieval, el foso perimetral, y la peculiar planta octogonal del Castel del Monte, primer prueba del simbolismo que caracteriza esta fortaleza.
La forma octogonal de la planta, que da a Castel del Monte la configuración de una elegante corona de piedra, está presente en todas las estancias del castillo. 8 son las habitaciones de la planta baja, 8 las del primer piso. Hay 8 torres que rodean el edificio, todas ellas de planta octogonal y dispuestas en las 8 esquinas de la planta.
Esta obsesiva recurrencia del número 8 hace de la fortaleza de Castel del Monte un lugar esotérico, fascinando a estudiosos durante siglos. Los misterios de la fortaleza no se quedan ahí y se van descubriendo poco a poco durante la visita. Se accede por el portal de entrada, un gran arco de estilo árabe con un tímpano grecorromano y bíforas góticas.
El color claro de las fachadas de piedra caliza y mármol blanco caracteriza el interior, ahora sin las decoraciones que lo adornaban. La luz que ilumina la primera planta procede de 8 ventanas individuales situadas en los 8 lados de la planta. El mismo número de ventanas se encuentra en la planta superior, con una pequeña diferencia: 7 ventanas tienen parteluz, mientras que solo 1, la que da a Andria, está dividida en 3 huecos.
Las 2 plantas de la fortaleza están conectadas internamente por escaleras de caracol situadas en 3 de las torres que rodean el edificio. Si ya has visitado otras estructuras construidas durante este periodo, notarás otro detalle interesante: las escaleras de caracol, cada una compuesta por 44 escalones, están dispuestas en sentido contrario a las agujas del reloj, en contra de las normas de construcción defensiva de la época porque habría obligado a los soldados llamados a defender el castillo a llevar su arma en la mano izquierda.
Este detalle es uno de los muchos que han llevado a los estudiosos a descartar la hipótesis de que el Castel del Monte se utilizara como estructura defensiva. Faltan los muros circundantes y el foso, las aspilleras son demasiado estrechas y todo el edificio no está en una posición estratégica.
¿Para qué servía entonces Castel del Monte? Tantas hipótesis y pocas certezas: un templo, un lugar apartado para sumergirse en el estudio, un lugar para relajarse según el modelo del hammam árabe o un observatorio astronómico.