Savignone

Centro del alto valle de Scrivia, se encuentra a los pies del monte Pianetto, rodeado de una verde cuenca de los Apeninos y de las montañas que marcan la división de aguas con el valle de Brevenna. Los rastros de los primeros asentamientos se remontan al siglo IV a.C. Sus orígenes están confirmados por los asentamientos de Golasecca, cuyos hallazgos se conservan en el Museo Pallavicini de Génova Pegli. Fue una posesión de los Tortonesi y en 1242 se sometió a Génova, que la convirtió en feudo de la familia Spinola; a finales de siglo pasó a los condes Fieschi de Lavagna. En 1636 Ugone Fieschi vendió parte de ella a Génova. A mediados del siglo XIX, gracias a su posición favorable, se convirtió en un lugar de veraneo para las familias genovesas y aún hoy Savignone no ha perdido su carácter de lugar de vacaciones. La ciudad está dominada por los restos del castillo Fieschi, mientras que la plaza de la ciudad está presidida por importantes edificios históricos como el palacio de la Meridiana, el antiguo hospital, el palacio Fieschi y la iglesia de San Pedro. El pueblo de Isorelle, construido alrededor de la fábrica de algodón De Ferrari, cuenta con algunos edificios industriales de especial interés. El mencionado pueblo también forma parte del parque natural regional de Antola: una de las zonas más encantadoras de los Apeninos y del interior de Liguria, gracias al extraordinario panorama del monte Antola, de 1600 m y a las actividades del cercano lago de Brugneto.