FattorMia, la startup para vacaciones y fines de semana agrícolas sostenibles e inteligentes

Tanto si quieres hacer una escapada de fin de semana como un auténtico viaje por las regiones italianas para descubrir vacaciones en l granja Bel Paese, desde hoy puedes planificar tus vacaciones en una granja a medida gracias a FattorMia, una startup que funciona a través de un portal online; navegando por el sitio puedes elegir el destino que quieras de norte a sur. Y no solo eso: puedes elegir los animales y los cultivos que quieres cuidar, ponerte en contacto con quienes trabajan la tierra y crían el ganado, y seguir sus progresos incluso al final de las vacaciones, durante todo el año.

La verdadera revolución de FattorMia, que hace posible el aprendizaje de nuevas actividades al aire libre, volviendo a abrazar la sencillez de la vida en la naturaleza, es precisamente el contacto directo entre las granjas y los usuarios: una vez elegida una granja, se te invitará a un almuerzo en la granja o a recoger personalmente los productos de la tierra in situ y a conocer "en persona" el animal que has adoptado. Si no, los más perezosos pueden recibirlo todo en casa con un pequeño coste de envío.  

En definitiva, FattorMia ofrece una vía de comunicación directa con los agricultores y los productores, permitiéndote visitar los viñedos y degustar una copa del vino que producen, aprender a acicalar a las cabras con cuya leche se elabora el queso que acabará en tu mesa, descubrir dónde y cómo crecen los tomates que le dan sabor a tus ensaladas.
Todas las actividades educativas pueden continuarse en casa, a lo largo del año, uniéndose a los programas que también han sido pensados para las escuelas. 

Los elementos fundamentales del proyecto son el compromiso con la sostenibilidad económica y medioambiental: unirse a FattorMia significa también contribuir a apoyar a las pequeñas explotaciones de calidad repartidas por nuestro país, que se comprometen a proteger la tierra y la biodiversidad en su día a día. De norte a sur, son ya muchas las realidades que se han conectado en el portal: te invitamos a conocer algunas de ellas.

En el Valle de Aosta se encuentra la granja de Erik Tognan, un apasionado agricultor que ha recuperado un manzanar de una parcela abandonada: lo cuida en nombre de una agricultura estrictamente natural, respetando los ritmos de las estaciones y la sostenibilidad medioambiental. Al igual que en el pasado, sus manzanas se alimentan únicamente de agua de montaña y abonos orgánicos.

Con un centenar de vacas, cabras y burros, la granja Tanghetti Moris, una pequeña empresa familiar situada en Val Trompia, en la provincia de Brescia. Si decides visitarlo en verano, podrás participar en las actividades de la pradera alpina, acompañando a los animales al pasto y llevándolos de vuelta al establo por la noche para el ordeño, o ver el proceso de elaboración del queso.

La granja SanWido, en San Vito di Cadore, en el corazón de los Dolomitas, nació del sueño de Enrico, un joven de 25 años: recuperar el antiguo oficio de agricultor. Junto con su familia, Enrico cuida de unas setenta cabras gamuzas alpinas, gallinas y abejas, y en verano también de un huerto. La tienda, situada junto al granero, vende los productos de la granja: leche, yogur, agrigelato, queso, conservas, todo ello con certificación ecológica.

Si te gustan los animales más exóticos, debe ir al centro de Italia, concretamente a la Toscana, y visitar AlpacaBrado, la primera granja de cría de alpacas Huacaya en Mugello, participando en los numerosos eventos que organiza la empresa u organizando visitas privadas para pequeños grupos.

Aquí en la Toscana, visitar a la Fattoria La Castellina, en la finca del siglo XIII de la familia Squarcialupi, a pocos kilómetros del pueblo medieval de Castellina in Chianti, es como darse un chapuzón en el tiempo. Quienes "adopten" la empresa podrán disfrutar de una experiencia sensorial completa en sus 140 hectáreas de viñedos, olivares y trigo, visitar las bodegas y disfrutar de una comida o cena con un menú degustación específico.

Pasando a la región de Marche, se encuentra la granja Si.Gi. que también ofrece talleres para niños. Aquí Giuliana y Silvano recuperan variedades de frutas antiguas ahora olvidadas y recetas tradicionales. En sus campos descubrirás el único cultivo en Italia de guindas, y luego plantas de azufaifa e higos blancos: delicias que luego se convierten en mermeladas, confituras y zumos.