La Ciclovia del Sole con niños

Siguiendo el símbolo del sol que señala el trazado, nos subimos a la bici para llegar a la ciudad de Crevalcore, donde, entre los elegantes palacios del centro histórico, nos encontramos con el Museo de títeres Leo Preti, definido como el «museo más pequeño del mundo». El museo, abierto los días señalados «in situ» o previa reserva, alberga la prestigiosa colección del titiritero Leo Preti, que nació y vivió en Crevalcore a principios del siglo XX. Aquí, los niños y también los adultos podrán admirar un teatro de marionetas original de la época, 110 fondos pintados que datan de diferentes periodos, numerosos títeres, y también trajes, pequeños muebles y accesorios.

Tras unos 9 km de carril bici se llega a San Giovanni in Persiceto, famoso por el pintoresco Carnaval del «spillo». No puedes dejar de visitar la colorida y escenográfica Piazzetta Betlemme, un rincón de Persiceto donde la realidad se encuentra con la fantasía: las coloridas pinturas murales del escenógrafo de cine Gino Pellegrini, realizadas con la técnica del trompe l'oeil, llenan el espacio creando una armonía de colores que el artista dedicó «a los niños de todas las edades». Verduras, animales fantásticos, pequeños homenajes al cine y falsas sábanas que parecen salir por las ventanas crean un juego de referencias cruzadas que le ha valido a esta pequeña plaza el apodo de «plazoleta de los engaños».

Continuando nuestro recorrido nos encontramos, a poca distancia de San Giovanni, con el área naturalista de La Bora, donde un rincón protegido de la naturaleza alberga numerosas especies de plantas y animales, especialmente aves.

Los niños podrán visitar el centro de repoblación del galápago europeo, donde, cada año, muchas pequeñas «tortuguitas» crecen y luego se liberan.

Continuando hacia Bolonia llegamos al territorio de Sala Bolognese. Aquí merece la pena tomar un pequeño desvío para llegar a Giocars, el Museo del Juguete en Movimiento. Un pequeño esfuerzo por las carreteras secundarias, en parte bordeadas por carriles bici, para poder admirar la amplia colección de juguetes antiguos, todos caracterizados por el tema del movimiento: desde coches de juguete y triciclos hasta calesas, caballitos balancín y tiovivos. Una experiencia única que deja a todos, grandes y pequeños, con la boca abierta.

Volvemos a ponernos en camino, también esta vez tomando un pequeño desvío en la ruta para llegar a Anzola dell'Emilia y cerrar nuestro itinerario con belleza, o, mejor dicho, ¡con mucho sabor! De hecho, nos espera el Museo del Gelato Carpigiani, el primer museo del mundo dedicado a la historia y la cultura del helado «Made in Italy». Además de la visita al Museo, es posible participar, previa reserva, en talleres y degustaciones diseñados específicamente para niños. ¡Una forma muy especial de terminar nuestro recorrido!