Catanzaro, la ciudad entre los dos mares

Catanzaro es conocida por ser la ciudad de las tres V, que hacen referencia a tres de las características que históricamente la distinguen: el viento, el «velluto» (terciopelo en italiano) y Vitaliano, su santo patrón. Las fuertes brisas marinas influyen en su clima, que lo hace bastante ventoso. La elaboración artesanal de la seda y los tejidos dio a Catanzaro una reputación internacional en el arte de la seda hasta 1800. San Vitaliano es el patrón de la ciudad y sus reliquias se enviaron aquí en agradecimiento por la acogida de la ciudad al papa Calixto II.

La ciudad cuenta hoy con modernas estructuras culturales, como el nuevo teatro Politeama, el complejo monumental de San Giovanni, sede de importantes exposiciones, la Arena al aire libre"Magna Grecia"y elauditorio "Casalinuovo".

En su centro histórico, se pueden admirar importantes monumentos e iglesias antiguas, como la catedral, que alberga en su interior la «Virgen con el Niño» de Antonello Gagini da Messina, que data del siglo XVI. La torre Normanna es lo que queda de los restos del antiguo castillo normando. Villa Trieste está rodeada de encantadores jardines que conservan plantas poco comunes y estatuas de personajes calabreses famosos en todo el mundo. Además, el Belvedere es un punto panorámico imprescindible, perfecto para contemplar el valle de la Fiumarella y el golfo de Squillace. Por último, el museo provincial alberga restos prehistóricos y colecciones de monedas antiguas.

La catedral de Santa Maria Assunta es el principal lugar de culto de la ciudad y fue construida en el siglo XII y restaurada en numerosas ocasiones. La primera iglesia, sobre la que hoy se levanta la catedral, se erigió en 1121, en época normanda, y se dedicó a santa María de la Asunción y a los apóstoles Pedro y Pablo. En 1309 se construyó la capilla dedicada a Vitaliano, santo patrón de la ciudad, donde se encuentran sus reliquias. La arquitectura actual presenta tres preciosas puertas de bronce en la fachada central y tres en la lateral con vistas a la Piazza Duomo, mientras que a la derecha se encuentra el campanario de 42 metros de altura, coronado por la estatua de bronce de la Asunción.

En su interior se pueden admirar algunas obras maestras, como la pintura de la Virgen de los Ángeles con el Niño de la escuela de Mesina, un busto del patrón de la ciudad, san Vitaliano, y, en el ábside, un lienzo de la Asunción del siglo XVIII.

La basílica de la Immacolata se construyó en 1254 en el corazón de la ciudad y, con el tiempo, ha experimentado profundas obras de ampliación que han contribuido a dibujar su aspecto actual. El interior alberga varias capillas, cada una de las cuales pertenece a familias nobles de la ciudad, que las han adornado con altares de mármol policromado y estuco. Entre las obras de arte presentes se pueden admirar la estatua de madera de San Roque, de fabricación napolitana, del siglo XVIII, y las estatuas de madera del siglo XVIII de san José, de la Dolorosa, de san Miguel y de san Alfonso, procedentes de la suprimida iglesia de Santa Caterina.

Construido en 1962 por el arquitecto Riccardo Morandi, en el momento de su construcción la cimbra del puente Bisantis era la más grande del mundo, con una altura de 120 metros, capaz de resistir ráfagas de viento de más de 140 km/h. Hoy en día, la estructura es la segunda de Europa en altura y la primera de Italia en luz, altura y longitud. El artefacto representa un verdadero monumento de ingeniería y arquitectura, tanto que se ha convertido en un símbolo de la ciudad.

Del complejo monumental de San Giovanni, construido sobre los restos del antiguo castillo normando entre los siglos XV y XVII, forman parte: la fuente monumental de «Il Cavatore», obra del escultor calabrés Giuseppe Rito, la gran plaza panorámica, la torre de Carlos V y los restos de las murallas del castillo. El complejo San Giovanni también cuenta con una gran área de exposición, dispuesta en dos plantas. Hoy en día, el complejo monumental se ha convertido en uno de los centros culturales y de exposiciones más importantes y prestigiosos del sur de Italia. Desde 2017, es posible visitar las antiguas mazmorras del castillo, totalmente seguras y conservadas en las mejores condiciones de uso.

El teatro Politeama, el más joven de los grandes teatros italianos, posee una estructura que respeta los cánones arquitectónicos del teatro clásico a la italiana, con la platea siguiendo un movimiento ondulatorio sobre una superficie casi cóncava. A lo largo de la línea curva de la sala, se asoman los cinco órdenes de palcos, decorados con estrellas de siete puntas como símbolos musicales. El escenario, con sus amplias dimensiones y sus dotaciones tecnológicas, acoge a artistas de todo el mundo, desde la gran lírica hasta la sinfónica, desde la danza hasta la opereta, desde el teatro hasta el musical. En la plaza de la entrada es posible admirar una fuente artística diseñada por el arquitecto Portoghesi.

El parque incluye un área verde que se extiende a lo largo de 60 hectáreas en el corazón de la ciudad de Catanzaro y constituye un ecosistema rico en fauna y flora, un lugar donde la dimensión natural se entrelaza con la cultural, deportiva y lúdica. El parque alberga en su interior las sedes del CRAS (Centro de Recuperación de Animales Silvestres), del MUSMI (Museo Histórico Militar «Brigada Catanzaro») y del Cuerpo de Policía Provincial.

Admira la prestigiosa colección de arte contemporáneo con las instalaciones de Dennis Oppenheim (Electric Kisses), Tony Cragg (Cast glance), Jan Fabre (De man de wolken meet/El hombre que mide las nubes), Mimmo Paladino (Testigos), siete esculturas de hierro del ciclo Time Horizon de Antony Gormley, una hormigonera de Wim Delvoye, Totem o la representación del personaje DarthVader, de Marc Quinn, y, por último, un díptico de bronce pintado por Stephan Balkenhol que representa a un hombre y una bailarina.

El MARCA representa un centro de museos multifuncional de excelencia, que abarca diferentes corrientes artísticas, desde el arte antiguo hasta el lenguaje contemporáneo. El museo está situado en un antiguo edificio del centro histórico y está organizado en tres niveles. El edificio cuenta con un bonito jardín y un patio, mientras que una gran terraza ofrece una sugerente vista de la ciudad. La exposición actual consiste en un notable patrimonio de obras que datan de entre los siglos XVI y XX, a las que se añaden las de la Fondazione Rotella, dedicada a Mimmo Rotella, natural de Catanzaro y uno de los mayores maestros del siglo XX. En la planta baja se han instalado la pinacoteca y la gipsoteca de la provincia, con unas 120 obras entre pinturas y esculturas, mientras que en la primera planta se encuentran la colección permanente Rotella y las salas dedicadas a exposiciones temporales. El sótano alberga el centro polivalente de cultura contemporánea.

Catanzaro Lido se encuentra a pocos kilómetros del centro de la ciudad y se extiende a lo largo de la costa jónica en el golfo de Squillace. En su paseo marítimo hay numerosos establecimientos para el baño, hoteles y locales. A pesar de su carácter típicamente marítimo, alberga numerosas arquitecturas religiosas y monumentos de importancia histórica y cultural, como el Ancora, imponente monumento dedicado a los caídos en el mar; la torre Tonnina, de unos 30 metros de altura, que formaba parte de la Ledoga, fábrica que producía el tanino; y en Gutta, una boya circular de 6 metros de diámetro situada en el paseo marítimo y utilizada para el atraque de los barcos pesqueros.

La cocina típica de la zona de Catanzaro se caracteriza por sus productos sencillos y genuinos, como el aceite de oliva, el «peperoncino» y el pan integral. Las especialidades locales que no debes perderte son la pasta china, pasta rellena de queso «provola», huevos duros y «soppressata», cubierta de salsa de carne y queso rallado, y la «ciambotta», un plato vegetariano de pasta seca cubierta de huevos fritos y queso «pecorino». Entre los platos más famosos encontramos u Murzeddhu, callos cocinados a fuego lento con salsa picante. La tradición dice que se come dentro de la pita, un pan típico de forma circular. También hay muchos postres característicos, como las «crocette», higos secos al horno rellenos de nueces, canela y cedro confitado, acompañados por el vino local, el malvasía.

Contenido elaborado con información proporcionada por el colaborador  Región de Calabria