En los Jardines Públicos de Gorizia, tras las huellas de los héroes de la Gran Guerra

A un paso del centro histórico de Gorizia, los Jardines Públicos de Corso Verdi, de 20.000 metros cuadrados, se construyeron en 1863 en terrenos que pertenecían a la familia De Grazia. Entonces, eran sólo dos hectáreas concebidas con un propósito preciso: convertirse en un lugar de descanso y placer para personas de alto rango que elegían la ciudad para vacacionar.

Funcionarios, políticos del Imperio Austrohúngaro y hombres de cultura, encontraban aquí lo que necesitaban para descansar del ajetreo de la vida cotidiana.
Atravesados por senderos, llenos de árboles comunes y de especies más codiciadas como el bambú y la mahonia japónica, los Jardines siguen siendo famosos por la fuente Gyulai, que lleva el nombre del mariscal que eligió Gorizia para pasar sus años de jubilación.

El estallido de la Primera Guerra Mundial y las intervenciones posteriores cambiaron su estructura original, y hoy los Jardines Públicos de Gorizia se convirtieron en los custodios de los recuerdos de esta tierra.

Para saber más, comienza desde plaza Cesare Battisti, delante de los Jardines.
Aquí se rinde homenaje a Enrico Toti, bersagliere romano fallecido el 6 de agosto de 1916 durante la sexta batalla del Isonzo, librada entre los ejércitos italiano y austrohúngaro.
Realizada en 1958 por el escultor y bersagliere Mario Montemurro, la estatua representa a Toti de pie con una pierna, un momento antes de lanzar su muleta contra las trincheras enemigas.

Toti estaba en una trinchera cerca de Monfalcone que permanecía sin vigilancia, pero a pesar de estar herido siguió incitando a sus compañeros a no rendirse. La prensa de la época hizo eco de su hazaña con numerosas ilustraciones. ¿La más famosa? La aparecida en Domenica del Corriereilustrada por Achille Beltrame. Ganador de la medalla de oro al valor militar, no sólo es una figura mítica de esa guerra, sino un símbolo de todos aquellos que no se rinden ante el enemigo.

Saliendo de la plaza, a menos de 300 metros del monumento a Toti, Via Luigi Cadorna alberga la Estatua del Soldado de Infantería Italiano. Encargado por la Associazione Nazionale del Fante, fue inaugurado en 1966 para celebrar el 50º aniversario de la conquista de Gorizia durante la Primera Guerra Mundial.

El monumento esconde una curiosidad: es una copia idéntica de la estatua colocada en Turín cinco años antes para las celebraciones del centenario de la Unificación de Italia.
Creada por el escultor Angelo Balzardi, representa a un soldado de infantería sosteniendo un fusil. A ambos lados de la base, dos placas conmemoran el número de soldados de infantería que han caído en todas las guerras en nombre de Italia.

En el interior de los jardines hay un busto de bronce dedicado al político friulano Giorgio Bombi. Hijo de irredentistas, fue durante mucho tiempo un defensor del carácter italiano de estas tierras, muy activo para abordar problemas relacionados con la escuela, en contra de la eslavización de los estudiantes italianos.

Detenido y deportado con su familia al estallar la Primera Guerra Mundial, fue nombrado Comisario Real de Gorizia tras el conflicto, y fue el primer alcalde de la ciudad, de 1918 a 1934. En el monumento, grabaron esta frase: "Giorgio Bombi / senador y alcalde / preparó y vivió / la redención / de la tierra de Isonzo / 1852 - 1939".

Los Jardines Públicos, un punto de referencia en la vida social y cultural de Gorizia, ofrecen el escenario perfecto para eventos y actividades al aire libre. Junto a la historia, hay hermosas especies de árboles de hoja perenne, así como árboles de hoja caduca, parches de Nandina domestica y Mahonia Japonica, así como parterres siempre bien cuidados.