Resumen
En el Alto Molise, entre ciclópeas rocas de piedra (las «morge»), a los pies del monte Caraceno, se encuentra Pietrabbondante, un pueblo que ha sabido conservar las huellas de su historia más antigua, creando un verdadero lugar del alma, con una narrativa original y un patrimonio cultural de inmenso valor. En Pietrabbondante, de hecho, aún se conservan los restos de las fortificaciones samnitas del monte Caraceno e, inmediatamente debajo, una amplia zona arqueológica rica en objetos, edificios y restos. En este lugar, los samnitas construyeron un complejo cultural formado por un anfiteatro (el único de este tipo en Italia), un templo y dos edificios a ambos lados. Visitar este lugar significa retroceder en el tiempo muchos siglos, respirar atmósferas antiguas que milagrosamente no se han perdido. Una curiosidad: el centro histórico, con su trazado medieval, se construyó precisamente con las piedras y los restos del yacimiento arqueológico.
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